La madrugada del pasado 20 de febrero se efectuó una acción policial de alto riesgo en una persecución que estuvo cerca de acabar en tragedia. Según indican las fuentes oficiales, efectivos de la Policía Local de Málaga detuvieron a un ciudadano de 31 años como presunto autor de un delito de atentado y varios delitos contra la seguridad vial por conducción temeraria, bajo la influencia de bebidas alcohólicas y careciendo de permiso.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 03.55 horas de aquella noche, cuando una patrulla del distrito Carretera de Cádiz dio el alto a un turismo que circulaba por el parque empresarial Guadalhorce de forma anómala, concretamente en zigzag y a velocidad anormalmente reducida, ha indicado la Policía Local en un comunicado. Así, los policías procedieron a identificar al conductor, momento en el reanudó la marcha a gran velocidad, iniciándose una persecución mientras los agentes radiaban por la emisora el itinerario de la misma.
La huida fue por varias vías de la ciudad, llegando a recorrer varios kilómetros en sentido contrario al estipulado, obligando a algunos conductores a realizar maniobras evasivas de emergencia para evitar una colisión frontal.
Sin perder de vista en ningún momento el turismo, otras unidades fueron incorporándose a la persecución, intentando cortar el paso al conductor que, lejos de detenerse, ejecutó maniobras que finalmente le llevaron a impactar contra dos vehículos policiales, sufriendo daños que le impidieron continuar la marcha, motivo por el que el conductor y los dos pasajeros intentaron huir a pie.
Uno de los agentes logró dar alcance al infractor, que le lanzó varias patadas que pudo esquivar, procediendo a la detención del hombre, que mostraba síntomas de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas y que dio positivo en la prueba realizada.
Por otro lado, respecto a los dos pasajeros del vehículo, uno de ellos fue detenido por un delito de atentado al acometer contra uno de los agentes, mientras el otro individuo también fue interceptado, aunque sin llegar a ser detenido.